La sobrepesca en nuestros océanos

sobrepescaEn pocas palabras, la sobrepesca es la eliminación de los peces a un ritmo más rápido de lo que las especies pueden reproducirse. Esto provoca la reducción de poblaciones enteras, la disminución de la estabilidad de los ecosistemas y el agotamiento de fuentes de alimentos para la vida marina y humana. Los científicos estiman que el 75% de las zonas pesqueras del mundo están plenamente explotadas, sobreexplotadas o ya se han agotado, y que sólo el 1% se recupera de tal agotamiento. En respuesta a la disminución en las poblaciones de peces, el número de buques de pesca ha aumentado. Es decir, hay demasiados barcos persiguiendo a un número muy bajo de peces.

Durante los últimos 50 años, las tecnologías de pesca han evolucionado para ser más eficientes que nunca. Los pescadores tienen la capacidad de pescar más lejos y más profundo, lo que resulta en la obtención de millones de toneladas de pescado cada año. Se estima que hemos eliminado un por ciento muy elevado de la población de grandes peces depredadores como el tiburón, el bacalao y el atún. Estas especies tienen una larga vida y su reproducción es lenta, por tanto sus poblaciones son excepcionalmente vulnerables a la sobrepesca. Tantas décadas de sobrepesca ha llevado a algunas poblaciones de peces a números tan bajos que la posibilidad de recuperación, si es aún posible, sería a largo plazo.

Existen otros efectos nocivos de la sobrepesca, por ejemplo la destrucción del hábitat y la captura incidental, que pueden causar cambios perjudiciales para el ecosistema marino.

La destrucción del hábitat. A medida que los pescadores se esfuerzan más para atrapar a un menor número de peces, sus métodos de pesca pueden causar impactos negativos al medio ambiente marino. Los buques de pesca con redes de arrastre o dragas destruyen hábitats oceánicos, ya que arrastran cualquier cosa que se encuentre a su paso. Estas prácticas pesqueras destruyen los refugios, la alimentación y las crías que son esenciales para la supervivencia de las especies.

La captura incidental. La pesca incidental es la captura accidental o no intencionada de especies. Esto ocurre cuando los pescadores utilizan grandes redes o métodos de arrastre para capturar grandes cantidades de pescado. A menudo terminan pescando otras criaturas, por ejemplo otros peces, tortugas marinas y mamíferos. A nivel mundial, uno de cada cuatro peces capturados de manera accidental es descartado muerto o moribundo.

Teniendo en cuenta que la captura incidental siempre afectará gravemente la estabilidad del ecosistema marino, debemos conocer las prácticas de pesca que ayudan a limitar sus efectos. Por ejemplo los pescadores deberían utilizar equipamiento de pesca que permita liberar y devolver rápidamente las especies no deseadas al mar.

Una vez que se han agotado determinadas especies de peces, los pescadores han comenzado a pescar nuevas especies, ubicadas en un nivel inferior de la cadena alimenticia, tales como cangrejos, sardinas y calamares. Anteriormente estas especies eran descartadas, pero se han ido convirtiendo en importantes fuentes económicas y alimenticias alrededor del mundo. Los problemas surgen cuando estas especies se agotan en el océano por el alto consumo humano. No hay que olvidar que muchas aves y mamíferos marinos dependen de ellas para sobrevivir, su ausencia genera impactos negativos en todo el ecosistema.

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